Mi nombre es Nerea, y desde 2017 me dedico profesionalmente a la fotografía, especializándome en sesiones infantiles y de familias.
Mi estilo de fotografía es natural y espontáneo, porque me apasiona contar historias reales: vuestra historia. Como madre de dos chicos, valoro los momentos auténticos y llenos de vida. Disfruto de leer, pasear por la naturaleza, reír a carcajadas y, como amante de los perros, mis dos compañeros peludos son parte de mi vida. Por eso, en mi estudio, las mascotas son siempre bienvenidas.
Prefiero los espacios abiertos, tranquilos y sin prisas. Por ello, siempre invito a quienes vienen a una sesión a relajarse y disfrutar del momento. En las fotos familiares, os animo a que os miréis, os sonriáis, juguéis, hagáis cosquillas y, sobre todo, seáis vosotros mismos. Yo me ocuparé de inmortalizar esos instantes únicos.